DESHUMIDIFICADORES PARA ELIMINAR LA HUMEDAD AMBIENTAL
La deshumidificación es el proceso de retirar el vapor de agua contenido en el aire, llamado también humedad, para ello se utilizan los deshumidificadores que son equipos capaces de sacar del aire toda la cantidad de agua sobrante, almacenándola en un depósito, o llevándola directamente a un desagüe. El objetivo principal de los deshumidificadores es ofrecer una solución inmediata y eficaz a los problemas originados por el exceso de humedad.
Actualmente son muchos los procesos industriales que, para llevarse a cabo, requieren de un ambiente con humedad controlada, las razones son variadas y se agrupan a razón del problema que se busca resolver.
Los deshumidificadores se han convertido en un aliado insustituible en el sector de la construcción para el secado de obra nueva, otro campo de aplicación es para el arenado o granallado y posterior aplicación de pintura en recipientes y equipos de la industria petrolera. Lo mismo ocurre en sectores industriales en los que hay determinados procesos de fabricación y almacenaje donde se exige que se controlen los porcentajes de humedad.
Para controlar los procesos de corrosión se busca mantener el aire, en la superficie del material ferroso, con una humedad relativa inferior al 50 por ciento.
Normalmente es por las noches que el material baja su temperatura y un poco de humedad en el ambiente permite alcanzar el nivel de humedad que detona la oxidación (45-50% RH).
La técnica de deshumidificación se usa para prevenir los problemas de corrosión en la protección de material militar, construcción de puentes, fabricación de material electrónico y semiconductores y para el almacenamiento de repuestos en la industria automotriz. En aplicaciones de restauración de daños causados por el agua o fuego la corrosión juega un papel muy importante.
Los deshumidificadores se utilizan en todo el mundo para proteger películas, cintas de video, documentos, libros, obras de arte y otros objetos que se encuentren en una biblioteca o museo. El control de la humedad y la temperatura son factores importantes en la preservación de documentos y obras de arte por lo que los sistemas de deshumidificación ayudan a crear las condiciones adecuadas.
Las galerías de arte, museos y bibliotecas son espacios públicos que requieren ventilación, lo que conlleva el ingreso de humedad. Con la instalación de un deshumidificador en estos edificios, es posible tratar la humedad desde el origen. En los archivos o bóvedas hay menos circulación de personas y, por lo tanto, existe menos ventilación y puede ser más apropiado instalar un vestíbulo y deshumidificar el aire en este espacio para evitar que ingrese al archivo.
En aplicaciones deportivas, la deshumidificación tiene experiencia probada en pistas de patinaje, piscinas climatizadas y cualquier deporte que se practique dentro de un recinto cerrado.
Como estas instalaciones siempre acogen a un gran público y el agua y el hielo son elementos que forman parte del espectáculo, se pueden propiciar numerosos problemas.
Utilizando deshumidificadores se obtienen las siguientes ventajas:
•Se mejora la calidad del aire interior
•Prevención de hongos
•Reducción de los costos de energía
•Prevención de la corrosión